miércoles, 20 de abril de 2011

Donde dije digo, digo Diego...



Supongo que nos pasa a todos, en algunos momentos o temas de nuestra vida, pero hay peña que con sus actos contradice de tal manera sus palabras que llama la atención... Deberíamos intentar ser un pelin mas humildes en nuestras afirmaciones, de como deben actuar los demás o lo que nosotros haríamos en el lugar de otros. Algunos se les llena la boca hablando de cuidar el medio, reciclar, evitar la contaminación y sin embargo recorren cientos de kilómetros diarios simplemente para ir al trabajo, porque en un alarde de flower-power, se fueron a vivir al culo del mundo, o por lo menos de su mundo.


Luego están los visionarios del que se debería hacer para fijar población en los pueblos donde el trabajo es temporal... Visionarios que en muchas ocasiones coinciden ser empresarios que cuando han necesitado cubrir un puesto de trabajo fijo para todo el año en su empresa han recibido curriculum de aquí y allá y han optado siempre por los de allá. Fijando así nueva población con sus actos?? No, todo lo contrario, ayudando a nuestros amigos los neo-rurales en su fomento de contaminación automovilística.



No quiero olvidarme de los gurús de la socialdemocracia y del sindicalismo, que se llenan la boca con su doctrina pero que luego como empresarios se dedican a contratar a sin papeles o a regatear derechos y sueldos a sus trabajadores.


O el mundo "mamis"... Nosotras tan preocupadas por la educación de nuestros hijos, preocupadas por quien es el monitor/profesor, o preocupadas por lo que les enseña, en el grado y en la forma... Tan criticas y tan exigentes con los profesionales, y tan torpes cuando la educación depende de nosotras. Nos falta paciencia...



Y somos fundamentales...

4 comentarios:

  1. lo peor de todo es el tiempo que perdemos justificando nuestras contradicciones....

    ResponderEliminar
  2. Y todo esto, se te ha ocurrido a ti solita? ;) Ya sabes lo que pienso... Increíble, pero cierto.

    ResponderEliminar
  3. Nos falta mirarnos a los ojos y reconocernos en los demás....

    ResponderEliminar